El abuelo Yagé... medicina

El abuelo Yagé: Medicina amorosa de la conciencia

Dicen que cuando uno va a tomar medicina, suceden dos cosas:
la primera es que la medicina lo llama a uno
¿Cómo?
Los indígenas dicen que el Gran Espiritu es el Gran Misterio, el como es misterioso;
y la segunda es que antes de tomar la medicina todo lo que empieza a pasar en esos días previos a la toma tienen relación con lo que se necesita sanar a través de la medicina.
El abuelo yage, es una medicina de la conciencia que nos permite mirarnos, en la medida en que acepte uno lo que ve como parte de sus propios conflictos internos, la experiencia es profundamente terapéutica, sino es profundamente terrorífica.
Si se logra la toma de conciencia de la situación que generaba el trauma o el nudo, viene la liberación emocional a traves de la purga, la cual se realiza a través de los fluidos corporales y produce un profundo "alivio".
En los días previos a la toma con taita Miro, me vi la película Tierra de Osos 2, esta película hablaba acerca de los nudos, de los pactos, de las promesas, de las relaciones que hacemos a lo largo de la vida y que crean lazos con otros seres.
Como nos lo plantean los Mauries, del desierto de Australia, desde su cosmovisión: "Todos los humanos son espíritus que sólo están de paso en este mundo, todos los espíritus son seres que existen para siempre.
Todos los encuentros con otras personas son experiencias y todas las experiencias son relaciones para siempre.
Los Auténticos(Mauries) cierran el ciclo de cada experiencia, no dejamos cabos sueltos como los mutantes (hombre occidental).
Si te alejas con malos sentimientos en el corazón hacia otra persona y ese círculo no se cierra, se repetirá más adelante.
No lo sufrirás una vez, sino una y otra hasta que aprendas" .
Desde las culturas aborígenes se entiende que todas las cosas poseen un espíritu, una esencia que les es propia y que les da características únicas y especificas, como bien lo decía Ruben Gonzalez un profesor de la comunidad Chami del municipio de Andes, Antioquia, "para el indígena todo es un ser humano", todo esta en interacción con todo y todo esta representado dentro de todo, el hecho de decir "todo es un ser humano" implica considerar que en cualquier momento estamos en relación con los espíritus de las cosas que nos rodean, hecho mas que comprobado por la física quántica, para la cual es imposible que halla una supuesta neutralidad del investigador a la hora de observar el fenómeno ya que su sola presencia afecta las propiedades energéticas del objeto de estudio.
Para el indígena la enfermedad es considerada como un mensajero que indica el estado del espíritu en relación a otros espíritus. Por eso para ellos es tan importante a la hora de tratar la enfermedad, identificar con cual espíritu el enfermo esta llevando una relación desarmonica, con el fin de armonizarla, "negociando" , por medio de rituales y expiaciones, con ese espíritu para que deje de afectar a la persona.
Desde la filosofía oriental la enfermedad es karma, el karma-dharma es como una ley de la agricultura: lo que se siembra se cosecha.
No entendida como una ley del Talion "ojo por ojo diente por diente", como se hace en occidente, no como venganza o castigo, sino como un "maestro" que enseña justo lo que falta por aprender...
(lo que no se aprende a las buenas se aprende a las malas pero igual se aprende).
Desde este enfoque el karma se asumiría como todo lo que la existencia trae para aprender justo cuando no se ha aprendido, el karma viene siendo la tendencia al cierre mismo de la vida, que enseña.
Desde esta perspectivas cuando el pasado no se vive a plenitud, impecablemente (es decir siguiendo el orden de la misma existencia, actuando de acuerdo con las leyes que rigen el universo para no entrar en fricción con ellas) entonces lo que no se logro integrar o sanar en su momento se repite en el presente.
Así la enfermedad se puede convertir en un mensajero, de las relaciones desarmonicas del hombre con su entorno, o de asuntos inconclusos llamados por algunos karma.
Pero lo que es importante para el hombre de la enfermedad no es la causa de la misma, pues en muchas culturas se asume que aunque el enfermo conozca la causa de la enfermedad, su proceso de curación empieza realmente cuando la acepta, al "soportala", pues sabe que bien sea por haber violado un tabú o haber descuidado a sus ancestros, o haber causado un daño a otro ser en una vida pasada, es su responsabilidad, y por lo tanto su proceso de cura, de sanación, depende de la actitud que asuma frente a la misma, de que acepte su mensaje y lo asuma.
Para estas culturas la enfermedad tenia un sentido y este sentido llevaba al enfermo a responzabilizarse por la cura de su enfermedad, por ese mensajero que le indicaba asuntos de su relación con el cosmos, frente a los cuales estaba en un estado desarmonico, y por armonía no me refiero a la falta de tensión sino al equilibrio entre las fuerzas que rigen la existencia, las cuales los orientales recopilaron en el Tao (de Lao T`se) y los egipcios en el Kybalion de Hermes Trismegistos.
Así pues no me queda mas que decir que la medicina de los abuelos nos permite contactarnos con ese mensajero y entender el porque y el para que de los asuntos que hemos sentido como dolorosos en la vida, y como esos asuntos tienen una directa relación con leyes tan simples como "lo que das es lo que recibes", de ahora en adelante será mas cuidadoso en mis relaciones, respondiendo por el daño que hicimos a la vida, comprendiendo que todos somos el mismo ser en la unidad infinita de la vida y comprendiendo el poder infinito del amor para sanar nuestras vidas, y devolvernos la armonía.
Ahora,
¿ustedes saben porque chocan en sus relaciones con tal o cuál persona, que lazo karmico los une?
Si quieren responderse y sanar ¡tomen medicina!